La sevillana Lola Artacho nos introduce en su novela Fuegos y Pecados en la palpitante y azarosa vida privada de tres princesas incas desposadas con los primeros conquistadores castellanos que llegaron a Perú. Especialmente, la de la princesa Chimpu Ocllo, madre de El Inca Garcilaso de la Vega, primer cronista mestizo de aquel Nuevo Mundo.Una obra donde no solo refleja las luces y sombras vividas por las mujeres incas, recoge igualmente, las luchas y pasiones de las primeras pioneras españolas que se aventuraron a cambiar su mundo por un sueño impredecible.