Indyra Oropeza tiene veinticuatro aÃąos, es mamÃĄ y hace tres aÃąos le diagnosticaron cÃĄncer. Cualquiera dirÃa que se trata de una ecuaciÃŗn difÃcil, y efectivamente lo es, pero ella demostrarÃĄ que la enfermedad es mucho mÃĄs que la convalecencia en una cama de hospital.
A su corta edad, Indyra ha afrontado este trance con rabia y miedo, pero tambiÊn con optimismo y un envidiable buen humor. La leucemia ha sido su maestra; la ha ayudado a conquistar su independencia haciÊndole descubrir, de un modo inesperado, la fuerza que solo tienen quienes han aprendido a amar y respetar su cuerpo con todas sus "imperfecciones".
He aquà la vida indÃŗmita de una joven cuya lucha se ha centrado no solo en combatir los estragos de la enfermedad, sino, especialmente, en confrontar los estereotipos que gravitan alrededor del cÃĄncer. Con L de leucemia es un testimonio sobre la enfermedad, pero sobre todo un manifiesto irreverente sobre la vida, que se sobrepone con vehemencia ante cualquier adversidad.