El multimillonario Cesare Brunelli había perdido la vista al rescatar a una niña de un coche en llamas y la única persona que lo trataba sin compasión alguna era la mujer con la que había disfrutado de una noche de pasión. ¡Pero se quedó embarazada!Y eso provocó la única reacción que Samantha no esperaba: una proposición de matrimonio. Él no se creía enamorado, pero Sam sabía que ella sí lo estaba. Y cuando Cesare recuperó la vista, Sam pensó que cambiaría a su diminuta y pelirroja esposa por una de las altas e impresionantes rubias con las que solía salir.