Cuando la persona contacta con esta herida a través de alguna experiencia cotidiana (objetiva o no), puede que exista un componente traumático del cual una parte de ella siente que debe protegerse. Así, la defensa psicológicas asociadas al posible trauma de injusticia es la rígidez.
Su gran miedo es el miedo a la frialdad emocional. Además, la defensa de rigidez cognitiva puede incluir: dificultad para aceptar las razones de los demás, dificultad para adquirir diferentes perspectivas, fuerte sensibilidad y reacción ante situaciones que la persona juzga como de injusticia, perfeccionismo.